Primera parte. El mejor Peter Berg de VERY BAD THINGS, sinónimo de sarcasmo, cinismo y crítica social. Ritmo vertiginoso, anarquía de efectos especiales, incluso cámara en mano y detrás de todo eso un superhéroe negro. Suena a serie B y Berg nos entrega, hasta la fecha, la mejor película de este género de lo que llevamos de año. Ni Hulk, Iron-man y compañía (a la espera del nuevo Batman de Nolan).
¿Cuántos superhéroes de color negro hay en la historia del cómic? El que les escribe, un ignorante en la materia, no recuerda ninguno. Will Smith, cada mejor en sus papeles, interpreta a un superhéroe marginal, borracho y negro. Sus formas no son las correctas y los destrozos que provoca en cada una de sus acciones son cuantiosos, en términos económicos. Como apunta D' Espósito en su crítica sobre la película, el discurso puramente capitalista acecha a Hancock. Es la visión econocimista, por encima de que como héroe salva vidas, la que le llevará entre rejas.
Hancock no es el modelo de superhéroe blanco. Vive a las afueras y sólo piensa en beber whisky. Sólo la perspicacia del relaciones públicas blanco le llevará al lugar del superhéroe blanco. Ese que cuida las formas (educado) y viste con su traje-uniforme. La imagen (el cómo) por encima del sentido heróico del asunto (el qué). Así funciona nuestra sociedad. Así piensa la maquinaria capitalista al ver beneficios en el talento ajeno, ese que puede moldear como el chico de los suburbios que pasa a ser estrella de la NBA. Estarán de acuerdo, una visión blanca domina el mundo, incluído el de los superhéroes.
Segunda parte. La película se acartona. Pasa a contarnos otra historia alejada de los planteamientos iniciales. Deambula como si de un melodrama se tratara. Recicla temática ya presentada en la (excelente) serie de televisión HEROES. HANCOCK cae en el despropósito...no se entiende. No hay nada más que decir, sólo destacar la sorpresiva actuación de la Theron. Berg vira hacia lo establecido, cosa que no había hecho, por ejemplo, con su opera prima.
Declaración sobre primeras y segundas partes. Análisis a desarrollar en cuanto qué peso tienen las primeras partes de las películas en el cine actual. Da la sensación que en la mayoría de las producciones se va de más a menos. Captar la atención del espectador, atarlo a la butaca/sillón durante un buen rato. Y al final la decepción. Cuánto prometía y fue "más de lo mismo". Cuestión de principios y finales.
[Se dice del aspecto de un cuerpo cuya superficie no refleja ninguna radiación visible. Dicho de una persona: cuya piel es de color negro]
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1 comentario:
Pienso que es de las peores películas estrenadas en lo que va de año, alucinante el morro que le echan y como nos han engañado a todos.
Saludos...
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