
¿Realidad o mentira? Mograbi manipula el testimonio del asesino. Enmascara la realidad. Y detrás de la máscara uno puede decir cualquier cosa, o no. Y con canciones la realidad parece menos cruda. Porque Avi canta, caricaturiza lo espantoso del relato. Z32 no es más que otra escalada en los planteos del cine documental.
Por suerte, hay un antes y un después. El silencio del final. Después de tanta palabra, la moral representada en la chica / compañera que mira al asesino / compañero después de escuchar, una vez más, su testimonio. Enmudece la sala. Todos esperamos la respuesta, el perdón, la salvación, el repudio, la redención, el castigo. No hay. Semejante duda queda del lado del espectador.
Yo me quedo con asesino.
Z32 de Avi Mograbi, FRA-ISR, 2008
No hay comentarios:
Publicar un comentario