14 de marzo de 2007

Tiempo de [memoria]

Facultad psíquica por el medio de la cual se retiene y recuerda el pasado.

Existen películas necesarias. ‘Iluminados por el fuego’ (de Tristán Bauer, Argentina, 2005) es una de ellas. Basada en el libro de ex combatiente Edgardo Esteban, la película narra sus experiencias, con dieciocho años, al frente del ejército argentino en el contencioso con Inglaterra por las Islas Malvinas, en 1982. Además, la película encara la cuestión relativa a los veteranos de guerra abandonados a su suerte luego de su escarnio inútil. ‘Iluminados por el fuego’ va más allá.

‘Iluminados por el fuego’ habla de la de necesidad de no perder la memoria. Se reivindica. Se recupera. Es un no a “tiempos pasados fueron mejores”, y es una apuesta por “lo que no puede volver a pasar”. Esta película, como muchas otras, se convierte en un instrumento valiente contra la mayor de las injusticias: el olvido. Pasa de ser un film denuncia a un film memoria: después de casi veinticinco años de esa tragedia, intenta romper tabúes, alejarse del discurso oficial y tiene el apoyo, incluso, del presidente de la nación, Kirchner. No sorprende, Argentina anulaba las Leyes de Punto Final en 2003.

Además de ser una película que refleja lo absurdo de una guerra, mostrando su irracionalidad, sus consecuencias en las personas que participan directa e indirectamente de la catástrofe...porque en una guerra hay personas que se matan, unas a otras, que sufren el dolor de una ausencia, y no son sólo fríos números de muertos y heridos. Hay otros que se empecinan en llamar guerra a otra cosa, donde un bando mata y el otro (indefenso) sólo muere. Ya lo hicieron películas como ‘Adiós a la armas’ (Frank Borzage, USA, 1932), ‘Senderos de gloria’ (Stanley Kubrick, USA, 1957) , ‘Platoon’/’Nacido el 4 de Julio’ (Oliver Stone, USA, 1986/1989) y ‘La delgada línea roja’ (Terrence Malick, USA, 1998).

Dos apuntes imprescindibles. Uno: el actor. Gastón Pauls interpreta a Esteban. Conocido, por muchos de nosotros, en ‘Nueve Reinas’ (de Fabián Bielinsky, Argentina, 2000). Nos basta con su mirada para estremecernos, para vivir en carne propia el horror (en el campo de batalla/exterminio) y el dolor (de la pérdida un amigo). Dos: el músico. León Giego (Sólo le pido a dios) canta a la memoria y contra los genocidas. Toda película con mensaje necesita de música con mensaje.

La película de Bauer ha ganado multitud de premios internacionales; de esos que reciben las historias con mensaje. Son tan necesarias estas películas como los premios de reconocimiento. El último galardón, el pasado 8 de mayo, en el festival Tribeca, apadrinado por Robert de Niro. Tiempo atrás, iniciaba su andadura con el premio ‘En Construcción’ de la edición número 52 del Festival Internacional de San Sebastián 2005, y en enero del año pasado, recibía el premio a Mejor Película Extranjera de Habla Hispana en los Premios Goya.

La memoria apunta hasta matar
a los pueblos que la callan
y no la dejan volar
libre como el viento.


[La memoria, León Giego]

ILUMINADOS POR EL FUEGO de Tristán Bauer, ARG, 2005

No hay comentarios: